Señala las proposiciones que forman parte de cada una de las oraciones, identifica en cada caso la proposición subordinada adverbial, y señala de qué tipo de subordinada adverbial se trata.
Jaime ha pasado el examen como ha podido.
La perdiz hacía como que no podía volar.
Te veré donde solíamos quedar.
Llegaré a la reunión no bien me lo permitan mis obligaciones.
El secuestro ocurrió hace ya treinta días.
Estaba como si le hubieran clavado banderillas negras.
No lo hemos visto por donde suele hacer su paseo diario.
Se quedó callado, como para concentrarse mejor.
Caminaba alegre por la calle, sonriendo con una expresión feliz.
Todavía hay disturbios por ahí, así que sé prudente.
Era tal su mal genio que todos sus amigos acabaron por apartarse de él.
Su casa es tal como yo me la había imaginado.
En el examen de conducir Etelvina se portó mucho mejor de lo que tú creías.
Tiene tanto cuanto quiere.
Esther come que da gozo verla.
Felicia come menos que un pajarito.
Lo escrito, escrito está; así pues, obedece.
Remigio sabe más que Einstein
La comunidad de propietarios rechazó mi propuesta y por consiguiente me marcho.
Eres más tonto que el que asó la manteca.
Eres tan tonto que serías capaz de asar la manteca.
Tú lo quisiste así, carga ahora con las consecuencias.
Estudia y el día de mañana llegarás a ser algo en la vida.
Aun habiendo tanta gente por la calle, el asesino consiguió escapar.
Te escucharé siempre que no tardes mucho.
Vete a tu casa, mamón, a que te frían un huevo, o voy a partirte la cara.
Como nadie me vio, pude colarme en la sala.
Con ser Estefanía tan remilgada, a los chicos les gusta.
Lo metieron en la cárcel por robar un saco de harina.
Una vez decidida la acción, no puedes rajarte.
No dije nada a la policía, con objeto de proteger a Julián.
Como me toque la lotería, dejo este cochino curro inmediatamente.
Como quiera que se había hecho tarde, decidieron pasar la noche en la cueva.
Cuando Marta lo asegura tan convencida, poderosas razones tendrá.
Habiendo estudiado a fondo el tema, no tengo miedo en presentar mi informe.
Me escucharás hasta el final, mal que te pese.
Los chicos bailaban para divertirse.
Siendo así las cosas, no tendremos ningún problema.
De haberme enterado de esta noticia, te la hubiera contado antes.
De tanto hablar se le quebró la voz.
No me haré miembro de ese partido así me aspen.
Os repetiré la definición por si no la habéis entendido.
Espérame, cariño, que ya voy.
Me enviaron a Tours, en Francia, a estudiar el proceso de embotado de la fresa.
Invertiré mucho dinero con tal de que me aseguren rápidos beneficios.
Vendrás a mi casa, quieras que no
¿cómo analizarías sintácticamente "no tengo miedo en presentar mi informe"?
ResponderEliminar