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domingo, 28 de agosto de 2011

Diminutivo



Un diminutivo es, según el Diccionario de términos filológicos[1]:

1.Palabra ordinariamente formada mediante la adición de un sufijo (-ico, -ito, -uelo, -illo, etcétera) al que tradicionalmente se atribuye una significación empequeñecedora: paquetito, plazuela, etc. Investigaciones modernas han denunciado como característica del diminutivo la expresión de un afecto.

Los sufijos derivativos más habituales en español son:

-ito, -ita (y sus variantes -ico, -ica / -illo, -illa)

-ete, -eta

-ín, ína

-ejo, -eja

-uelo, -uela

La adición de un sufijo es la forma más normal de expresar el diminutivo. En otras lenguas se emplean adjetivos que equivalen a pequeño, pero en español se prefiere cambiar la terminación (un buen ejemplo es El principito, que en francés es Le petit prince).


Índice
1 Valor de los diminutivos


2 Nombres que no forman diminutivos


2.1 Por razones fonéticas


2.2 Los derivados aumentativos


2.3 Los nombres que aluden a...


2.4 Los nombres abstractos y los de acción


3 Los diminutivos y los compuestos


3.1 La naturaleza formal del compuesto


3.2 El grado de fusión entre las partes del compuesto


3.3 Interpretación literal o figurada del compuesto


4 Terminación según el género


5 Acentuación


6 El proceso de derivación diminutiva


6.1 Terminados en –ito, -cito, -ecito (y sus variantes en género femenino –ita, -cita, -ecita)


6.2 La terminación -uelo


7 Distribución


8 Notas y referencias



  1.  Valor de los diminutivos

Los diminutivos no cambian el significado de las palabras de las que se derivan, pero aminoran el tamaño del objeto al que se refieren. Su función es enfatizar el mensaje que se transmite.

En ocasiones pueden añadir un valor apreciativo o afectivo, en función del contexto, que a veces es el único matiz que se presenta, y no el de tamaño, cuando dicho objeto no puede ser disminuido, como en pesetilla o semanita.

Además, hay palabras como ganchillo, acerico o pañuelo que con el tiempo se han lexicalizado, es decir, han perdido la connotación diminutiva que tuvieron en su origen.

2. Nombres que no forman diminutivos

No existe un criterio claro que permita saber si una palabra puede tener un diminutivo, y puede depender del uso. En alguna ocasión, se puede formar un diminutivo de un nombre no compatible para llamar la atención.

Por razones fonéticas

Los nombres terminados en –ao.

Podrían tomarse por vulgarismos de unas supuestas formas cultas terminadas en –ado, excepto en las variantes dialectales que se caractericen por la pérdida de la -d- intervocálica a final de palabra, como en el caso del andaluz (pescado>pescao>pescaíto). La única excepción es bacaladito, al que se ha añadido una –d- (igual que se le añade a, por ejemplo, bacaladero).

cacao *cacaíto

nao *naíto Los nombres terminados en -s.

Cortés *cortesito

Finolis *finolisito Los derivados aumentativos

No se puede hacer el diminutivo de un aumentativo ya que son derivados de significados opuestos, a menos que se aplique a un aumentativo que pueda admitir grados de dimensión, como para puñetazo se puede derivar puñetacito, saloncito o silloncito.

Casaza +ita

Librazo +ito Los nombres que aluden a...

Idiomas.

Fiestas.

Lugares.

Territorios o instituciones en que ejerce un mando una autoridad.

Profesiones o actividades con el sufijo –ista.

Los puntos cardinales o de orientación.

Los nombres abstractos y los de acción

Sí lo admiten si se han lexicalizado como un nombre concreto y contable (aspereza>asperecita [callosidad en la piel] o alianza>aliancita' [anillo]) o con los terminados en –ura, -miento, -ción, -sión y –zón, ya que el diminutivo resulta familiar y aceptable para el hablante por ser recurrentes en la lengua a modo de nombres concretos y contables.

El resto, como agudeza, alevosía, gravedad, abundancia, etc., no admiten las formas en diminutivo.

3. Los diminutivos y los compuestos

Los compuestos, por lo general, no pueden tener sufijos apreciativos.

Entre los criterios para establecer qué compuestos pueden derivarse con diminutivos y cuáles no, los más importantes son:

La naturaleza formal del compuesto

Los compuestos formados por dos nombres enlazados de la preposición de solo admiten los diminutivos en el primer elemento del compuesto, tienen un carácter estrictamente afectivo cuando se refieren a la cualidad de una persona y no se pueden derivar si son expresiones metafóricas.

Tocinillo de cielo y no *Tocino de cielillo

Piquito de oro (carácter afectivo)

Cabeza de turco

Lengua de trapo El grado de fusión entre las partes del compuesto

Los compuestos formados por un adjetivo y un nombre se pueden derivar con diminutivos sin problemas, aunque la forma de derivarlos dependerá del grado de cohesión al que hayan llegado los formantes.

El significado del compuesto altavoz es muy distinto de lo que significaría en una frase la unión de estas dos palabras por separado. El diminutivo sería altavocito, puesto que se forma a partir de la palabra altavoz, mientras que si se hubiera formado a partir del segundo elemento del compuesto el resultado sería altavocecito (de voz, vocecita).

El significado del compuesto malaleche se percibe de forma muy similar a como se entendería en una frase la unión de estas dos palabras por separado. Es por ello que el diminutivo se forma a partir del segundo formante, de leche, lechecita y, por lo tanto, obtenemos malalechecita y no *malalechita, que sería el resultado de derivar a partir del compuesto.

Interpretación literal o figurada del compuesto

Los compuestos que se interpretan de forma figurada se derivan a partir del primer formante, como bracito de gitano, que se referiría a un dulce de esta clase, de pequeño tamaño.

Los compuestos que se interpretan de forma literal se derivan a partir del segundo formante, como brazo de gitanito, que se referiría al brazo de un niño gitano.

4. Terminación según el género

En general, la terminación es la del género que corresponde a la palabra a la que se añade: -ita para el femenino e -ito para el masculino:

la casa, la casita

el libro, el librito

el jefe, el jefecito

la señal, la señalita

el canal, el canalito Sin embargo, los nombres femeninos que terminan en –o y los nombres masculinos que terminan en –a, conservan la terminación de la palabra:

la foto, la fotito

la mano, la manito (en América)

la moto, la motito

el planeta, el planetita

el cura, el curita

el esquema, el esquemita

el diploma, el diplomita

el día, el diita

5.  Acentuación

Los diminutivos que terminan en -ía/-io se acentúan a menudo cuando se forman como -iita/-iito, pero según las reglas generales (llanas terminadas en vocal) no se debe hacer:

día, diita, no *diíta

Rocío, Rociito, no *Rociíto

6. El proceso de derivación diminutiva

Terminados en –ito, -cito, -ecito (y sus variantes en género femenino –ita, -cita, -ecita)

Estas pautas sirven para la formación de la mayoría de los diminutivos, aunque hay excepciones que no se ajustan a ellas, debido a que todavía no hay un estudio definitivo que establezca un modelo riguroso de diminutivización.

1.Monosílabas, cuya tendencia es a formarse con la forma –ecito (panecito) y dar lugar a palabras tetrasílabas. Hay casos, como en pie, que para llegar a las cuatro sílabas se duplica el interfijo –ec-, dando lugar al diminutivo pi-ec-ec-ito.

1.Bisílabas, admiten cualquier forma (-ito, -cito, -ecito), aunque la distribución suele ser de la siguiente manera:

suelen formar palabras trisílabas cuando terminan en...

•... vocal átona –a: cama>camita

•... vocal átona –o: coro>corito



suelen formar palabras tetrasílabas cuando termina en...

•... consonante: reloj>relojito, doctor>doctorcito

•... vocal –e: traje>trajecito, sastre> sastrecito

•... vocal tónica –a: sofá>sofalito

•... vocal tónica –o: ¿?



1.Polisílabas,

Tienden a formarse con –ito si terminan en...

•... vocal: palmera>palmerita, sombrero>sombrerito.

•... consonante que no sea –n o –r: esposas>espositas.



Tienden a formarse con –cito si terminan en –n o –r: chaquetón>chaquetoncito, vestidor>vestidorcito.

Los sufijos diminutivos -ico, e -illo funcionan de la misma manera que -ito y su uso depende más de las preferencias regionales que del contexto lingüístico.

Estas normas, además, pueden resultar alteradas a causa de las variantes dialectales, como en el caso de algunas zonas del español de América, que prefiere la forma –ito en lugar de –cito (sol> solito, solecito).

La terminación -uelo

Cuando se forma un diminutivo con esta terminación de una palabra que acabe en dos vocales que no formen diptongo y cuya penúltima sea e o i tónicas, pasa a ser -huelo (para reflejar la pronunciación): de aldea, aldehuela.

7. Distribución

Los diminutivos más frecuentes, son su distribución, son:[1]

-ito o -ita: es el más común y usado por los hispanohablantes; así, la palabra "gordo", agregándose la raíz se convierte en "gordito", si se termina en la silaba "co", como la palabra "flaco", se convierte en, flaquito. Además en algunas palabras, se usan de forma más amplia, como:



cito, como "toquecito", no "toquito". "Suavecito", en vez de "suavito".



ecito, ecita, como "lucecita", en vez de "lucita".

-ico o -ica: es común en la parte oriental de España, es decir, Andalucía Oriental, La Mancha, Aragón, Navarra, Murcia y Comunidad Valenciana occidental (parte castellano hablante); Una forma parecida se da en los países bañados por el Caribe: Venezuela, Cuba, República Dominicana, Colombia y Costa Rica. En el caso de las regiones españolas es sustituto de "ito", en cambio, en los países caribeños es para evitar una cacofonía cuando la última sílaba de la palabra comienza por "t"; en vez de usarse, por ejemplo, con la palabra "gato", "gatito", o con "potro", "potrito", en estos países se dice "gatico" y "potrico".

-illo o -illa: Se usa especialmente en España (siendo muy común en Andalucía) y un uso mucho menor en América. Sus usuarios lo emplean con la característica de que no expresa connotación enfático-afectiva alguna, a diferencia del otro diminutivo que utilicen, ya sea -ito o -ico (en el sureste peninsular).

-ete o -eta: Es de origen catalán y valenciano y de uso más informal que los anteriores. Se usa también en La Mancha. Ejemplos: amigo, amiguete.

-ín o -ina: Su empleo se extiende especialmente por Asturias, Extremadura, Castilla y León y Andalucía Occidental es otro sustituto del diminutivo "ito", aunque se usa de una manera más exclamativa, por ejemplo la palabra "pelo", en vez de "pelito" se prefiere usar "pelín"..

-uco o -uca: Es el diminutivo propio de Cantabria, donde su uso es muy común y en numerosas ocasiones denota afecto o cariño: hermanuco, casuca, puebluco. En otras ocasiones es sustituto del diminutivo -ito -ita: bajuco (bajito), pero no denota cariño, simplemente se usa como diminutivo. En ciertas zonas de la Cantabria más rural se emplea el -ucu. Cantabria es conocida popularmente como "la Tierruca". Este diminutivo tiene un uso muy restringido en el resto de España, donde habitualmente posee un carácter despectivo: ventanuco.

8. Notas y referencias

1.↑ http://es.wikipedia.org/wiki/Diminutivo

1.^ Diccionario de términos filológicos, Fernando Lázaro Carreter, 1968, ed. Gredos, Madrid. ISBN 84-249-1111-3.

2."La derivación apreciativa", por Fernando A. Lázaro Mora, en el vol. 1 de Gramática descriptiva de la lengua española, dirigido por I. Bosque y V. Demonte. 1999, ed. Espasa, Madrid. ISBN 84-239-7918-0 (tomo 1); ISBN 84-239-7917-2(obra completa).

3.Procedimientos de formación de palabras en español, Ramón Almela Pérez. 1999, ed. Ariel, Barcelona. ISBN 84-344-2844-X.

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