EL PAÍS - Madrid - 26/05/2010
Más de 30 escritores de todo el mundo participarán en la programación que ha organizado Babelia durante la 69ª Feria del Libro de Madrid, a través de su blog Papeles perdidos, en ELPAIS.com. La inauguración de esta fiesta literaria en el ciberespacio la hará el noruego Jostein Gaarder, el viernes a las cinco de la tarde, a través de un chat desde la sede de EL PAÍS, en Madrid.
La programación empezará mañana y se prolongará hasta el 13 de junio. El blog (http://blogs.elpais.com/papeles-perdidos/) se convertirá en un espacio digital que servirá a la revista literaria y cultural de este periódico como plataforma y escenario de una agenda complementaria a la tradicional cita madrileña a través de vídeos y chats con escritores como Carlos Fuentes, William Boyd, Jorge Volpi, Chuck Palahniuk, Laura Restrepo, Asa Larsson, Boris Pahor, Julia Navarro o John Banville. Además, los lectores podrán participar en la elaboración de un cuento colectivo.
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jueves, 27 de mayo de 2010
La España del pinganillo
Enrique Montiel
EL gesto adusto, realmente serio, del vicepresidente español Manuel Chaves, llevándose la mano a la oreja para colocar un pinganillo con el que poder entender lo que el presidente Montilla decía en el Senado, es la foto fija de la España actual. Es una imagen que no tiene precio, impagable, para el imaginario nacionalista. En el Senado de España, el vicepresidente del Gobierno de España entra por el pinganillo, si quiere entender lo que ha venido a decir el presidente de Cataluña. La lengua común de los españoles, llamada "castellano" por transigencia en la Constitución de 1978, será lo común que se quiera pero "los territorios" que la integran tienen su propia lengua que imponer a los ciudadanos, arrinconando la común que nos ha unido desde hace siglos y siglos.
Algunos cotillas han evaluado el esperpento en 7000 euros. Que es lo que ha costado el trabajo de traducir el mensaje a la lengua común. Y viceversa. Es como lo de cierto político valenciano que se llevó a Barcelona un traductor del catalán al valenciano. Era el mensaje, que el catalán y el valenciano son lenguas que requieren de traducción para ser entendidas.
¿Nadie va a mandar parar? Digo a no elevar el disparate a la categoría de tenebroso esperpento. O sea, que si el Senado es la cámara territorial de España, ¿tiene que ser necesariamente una jaula de grillos, una ONU chunga multilingüe con traducción simultánea? Se malician en el tripartito catalán, y en la oposición nacionalista del tripartito, que el Tribunal Constitucional sí o sí va a darle un portazo a su estatuto. Y han montado una carrera de sacos en la feria de los intereses y las vanidades, una barraca de feria cateta en donde el altoparlante aturde a la parroquia con las ventajas de la tómbola que siempre da premio. ¿Y nadie va a decirle cuatro cosas a este señor envarado, cordobés de primera nación, y "recordguinnes" del catalanismo más agresivo y rampante? Digo que si nadie le va a decir que se deje de vainas y no contribuya tan decisivamente a la esquizofrenia patria, en el sentido doceañista del término patria, esa que constitucionalmente los españoles reunidos debíamos amar por obligación moral, así como el ser justos y benéficos.
Con la que está cayendo, por Dios. Y esa certidumbre que no queremos aceptar, que nos negamos a contemplar, de que algo más gordo se avecina. Más peor, dicho en román paladino. Porque si nos dicen que que ahora es el tiempo de la estrechez y el sacrificio, pero nos aguardan días con sol, días felices, pues es como cuando a la espera de la salud soportamos estoicamente la enfermedad. Pero esto, esto… El ahora sí y mañana no, y lo del pinganillo, la España del pinganillo… ¿Se puede soportar?
EL gesto adusto, realmente serio, del vicepresidente español Manuel Chaves, llevándose la mano a la oreja para colocar un pinganillo con el que poder entender lo que el presidente Montilla decía en el Senado, es la foto fija de la España actual. Es una imagen que no tiene precio, impagable, para el imaginario nacionalista. En el Senado de España, el vicepresidente del Gobierno de España entra por el pinganillo, si quiere entender lo que ha venido a decir el presidente de Cataluña. La lengua común de los españoles, llamada "castellano" por transigencia en la Constitución de 1978, será lo común que se quiera pero "los territorios" que la integran tienen su propia lengua que imponer a los ciudadanos, arrinconando la común que nos ha unido desde hace siglos y siglos.
Algunos cotillas han evaluado el esperpento en 7000 euros. Que es lo que ha costado el trabajo de traducir el mensaje a la lengua común. Y viceversa. Es como lo de cierto político valenciano que se llevó a Barcelona un traductor del catalán al valenciano. Era el mensaje, que el catalán y el valenciano son lenguas que requieren de traducción para ser entendidas.
¿Nadie va a mandar parar? Digo a no elevar el disparate a la categoría de tenebroso esperpento. O sea, que si el Senado es la cámara territorial de España, ¿tiene que ser necesariamente una jaula de grillos, una ONU chunga multilingüe con traducción simultánea? Se malician en el tripartito catalán, y en la oposición nacionalista del tripartito, que el Tribunal Constitucional sí o sí va a darle un portazo a su estatuto. Y han montado una carrera de sacos en la feria de los intereses y las vanidades, una barraca de feria cateta en donde el altoparlante aturde a la parroquia con las ventajas de la tómbola que siempre da premio. ¿Y nadie va a decirle cuatro cosas a este señor envarado, cordobés de primera nación, y "recordguinnes" del catalanismo más agresivo y rampante? Digo que si nadie le va a decir que se deje de vainas y no contribuya tan decisivamente a la esquizofrenia patria, en el sentido doceañista del término patria, esa que constitucionalmente los españoles reunidos debíamos amar por obligación moral, así como el ser justos y benéficos.
Con la que está cayendo, por Dios. Y esa certidumbre que no queremos aceptar, que nos negamos a contemplar, de que algo más gordo se avecina. Más peor, dicho en román paladino. Porque si nos dicen que que ahora es el tiempo de la estrechez y el sacrificio, pero nos aguardan días con sol, días felices, pues es como cuando a la espera de la salud soportamos estoicamente la enfermedad. Pero esto, esto… El ahora sí y mañana no, y lo del pinganillo, la España del pinganillo… ¿Se puede soportar?
lunes, 24 de mayo de 2010
¿Qué obra literaria memorizaría para salvarla del fuego?
Por: Winston Manrique Sabogal
"Me gustaría que todo aquel o aquella que lea esta introducción se tome un tiempo para escoger el libro que más le gustaría memorizar y proteger de cualquier censor o 'bombero'. Y no sólo escogerlo, sino dar las razones de por qué querría memorizarlo y de cuál es el valor por el que debería recitarse y recordarse en el futuro". Esta es la invitación y propuesta que hace Ray Bradbury en la introducción que ha escrito para la reciente versión gráfica que se ha hecho de su clásico Fahrenheit 451, con ilustraciones de Tim Hamilton, y que en España distribuirá la próxima semana 451 Editores.
Interesante, importante, bonita y muy literaria cuestión la que formula Bradbury. Y esa es la pregunta que traslado hoy en este post como un homenaje al libro en su día. Un juego, sí, pero nada fácil. Porque en esa decisión no entra sólo el gusto o el placer que me ha producido o despertado un libro, o la presencia de su recuerdo, sino que implica otras consideraciones, como que ese Libro a memorizar sea una especie de legado y riqueza del cual yo seré portador y albacea. La respuesta es un cruce de variables que incluyen no sólo el fondo y la forma de esa obra literaria, sino también la trascendencia o finalidad que le podamos atribuir y que va más allá de nosotros mismos.
Homero y las fosas del franquismo
Por Guillermo Altares
Homero es un misterio dentro de un enigma: apenas sabemos casi nada del bardo (de hecho ni siquiera sabemos si existió) que compuso las dos obras más importantes de la literatura occidental: La Iliada y La Odisea. Alguien dijo que sólo existen dos historias que se puedan contar: la de una guerra y la de un hombre que vuelve a casa tras un largo viaje. Y es cierto. "Nos cuesta imaginar que, hace tanto tiempo, conocíamos ya palabras para designar nuestras experiencias más desconcertantes y nuestras emociones más profundas", escribe Alberto Manguel en el emocionante ensayo que acaba de publicar Debate, El legado de Homero (editado en una extraordinaria traducción de Carmen Criado). "La figura fantasmal a la que damos el nombre existe en la oscura distancia, como las ruinas de un edificio cuya forma y propósito ignoramos. Y, sin embargo, aquí y allá en sus libros, se encuentran quizás los indicios de una respuesta". (si quieres seguir leyendo, pincha el título)
viernes, 21 de mayo de 2010
No olviden a López Estrada
No olviden a López Estrada
Juan Luis Pavón - Diario de Sevilla
HA muerto Francisco López Estrada. Enorme figura de la Universidad de Sevilla de 1955 a 1980. Eminente catedrático de literatura que luchó, como decano de la Facultad de Filosofía y Letras, por hacer justicia en pleno franquismo a Juan Ramón Jiménez, por reivindicar a los dos Machado, por recuperar a Bécquer. Impresionante su bibliografía, con más de 500 libros o trabajos de investigación sobre autores y obras desde el Medievo hasta sus poetas coetáneos.
Nacer en Barcelona en 1918 y morir en Valencia hace tres días no es excusa para que la Academia de Buenas Letras y la Hispalense, tan prestas en darle coba a personajes sin ilustración pero con dinero, estén calladas y no rindan testimonio de admiración y gratitud a un personaje con el que tantos han aprendido. López Estrada era una ventana de aire limpio en un ambiente castrante. Impartió conferencias, clases y seminarios en 53 universidades extranjeras (incluyendo Oxford, Cambridge, Harvard y Princeton) y ejerció de profesor visitante en cinco norteamericanas, casi todo ello durante su fecundísima etapa sevillana.
En la historia de la castración intelectual de la Sevilla franquista, es capítulo destacado la presión que en 1959 ejerció el rector de la Hispalense, José Hernández Díaz, contra el decano López Estrada para que expulsara a su mejor alumno y discípulo: Francisco Márquez Villanueva, cuya brillantez desentonaba ante el sindicato vertical de muchas cátedras. Y Márquez, para que a su admirado maestro ni lo destituyeran de decano ni lo degradaran per se, optó por irse a Estados Unidos y empezar una andadura en libertad que lo ha tenido más de 40 años descollando desde Harvard.
No contemos en 2010 la historia contemporánea de Sevilla aún desde el prisma del Nodo y de los que salieron en la foto. Hubo muchos métodos para labrarse una biografía de vencedor a nivel social y ocultar la creación de nuevos vencidos.
domingo, 16 de mayo de 2010
Un recuerdo de Mujica Lainez
Manuel Mujica Lainez (Buenos Aires, 1910 - Córdoba, 1984), del que este año se celebra el centenario de su nacimiento, fue un escritor cosmopolita y profundamente original. Su obra más conocida es una de las grandes novelas sobre el Renacimiento italiano, Bomarzo, inspirada por el bosque de monstruosas esculturas situado al norte de Roma, cerca de Viterbo. Como ocurre con Yo, Claudio, la narración histórica esconde muchas cosas y, a lo largo de sus 600 páginas, el lector se encuentra con una reflexión sobre el poder o sobre el paso del tiempo mientras a la vez se sumerge en una documentadísima descripción de aquellos tiempos florentinos en los que mundo cambió. Pero la obra de Mujica Lainez es inmensa y no siempre fácil de encontrar: ahora RBA acaba de rescatar una pequeña joya, Cecil, la autobiografía del narrador pero contada a través de su perro.
Siete traductores para que el cordobés Montilla hable en catalán en el Senado
D. P. MADRID Sábado , 15-05-10
El presidente de la Generalitat, José Montilla, intervendrá el día 24 de mayo en la Comisión General de Comunidades Autónomas en el Senado y lo hará en catalán para reclamar la renovación del Tribunal Constitucional. Una decisión que obligará a contratar a siete traductores: dos de catalán, dos de euskera, dos de gallego y uno de valenciano. Una iniciativa que -según la agencia Efe, que cita fuentes de la Cámara- costará un mínimo de 6.500 euros. Los traductores cobran por horas y ese es el precio por 180 minutos de trabajo. Si Montilla o sus interlocutores se muestran inspirados o irrefrenablemente locuaces la cuenta podría subir considerablemente.
Lo curioso es que Montilla es cordobés. Nació en Iznájar y no pisó suelo catalán hasta los 16 años, que fue cuando se trasladó con su familia a Sant Joan Despí. La lengua materna de Montilla es el castellano . Y en ese castellano se saludarán todos los participantes en la antesala y será ese idioma el que utilicen cuando se saluden fuera.
El café, en español
Todos saben hablar castellano y para la inmensa mayoría o es la única lengua que conocen o en la que hablan en la intimidad. Sin embargo, todos aquellos que no entiendan las cuatro lenguas cooficiales deberán colgarse los auriculares. Esta peripecia ocurre en pleno proceso de recortes sociales, de bajadas de salarios de los funcionarios, de congelación de pensiones y con cerca de cinco millones de parados a los que les costará entender semejante dispendio.
Por los pasillos de la Cámara Alta aún se recuerda el ridículo que se vivió cuando el año pasado se contrataron a otros siete traductores para poder entender al protagonista de aquella mañana, que no era otro que Manuel Chaves. O cuando en 2008 se repitió la cuestión para escuchar a la mismísima Elena Salgado.
En fin, al menos se gastarán 6.500 euros por un hecho aislado que podría convertirse en cotidiano si sale adelante la propuesta de reforma del Reglamento del Senado, que propugna la implantación del uso de las lenguas cooficiales -gallego, catalán, valenciano y euskera- durante los Plenos. En abril, la Cámara aprobó la toma en consideración de esta iniciativa de los nacionalistas, que se encuentra en la fase de enmiendas.
Y queda la gran pregunta: ¿Si tres horas de trabajo cuestan 6.500 euros, cuánto supondrá para el erario la presencia permanente de traductores? De acuerdo con los promotores de la idea: 120.000 euros al año. Pero, según los cálculos del PP, tal como adelantó ABC, la ocurrencia supondría un gasto de 1.224.000 euros «sin contar el soporte de las actas».
La Residencia de Estudiantes celebra sus cien años con poesía, arte y música
Ana Mendoza Madrid, 14 may (EFE).- Espacio para la reflexión y el pensamiento, la Residencia de Estudiantes cumple cien años y lo celebrará con "la austeridad" que caracteriza su labor. Habrá ciclos de poesía, exposiciones y conciertos, y se compartirá esta efeméride con instituciones como el Museo del Prado y el Reina Sofía.
En realidad, lo que quieren los responsables de la Residencia es que el centenario les pille "con la misma actividad" que vienen desarrollando desde hace años, según explicó hoy la directora de esta institución, Alicia Gómez Navarro, en un encuentro con la prensa en el que también intervino José García Velasco, comisario del centenario.
El 8 de mayo de 1910 se publicó el Real Decreto del Ministerio de Instrucción Pública por el que se creaba la Residencia de Estudiantes, que abrió sus puertas el 1 de octubre de ese año y que, en poco tiempo, se convirtió en uno de los principales focos culturales, educativos y científicos de la España del primer tercio del siglo.
Juan Ramón Jiménez, Santiago Ramón y Cajal, Ortega y Gasset, Moreno Villa, Eugenio D'Ors, García Lorca, Buñuel, Dalí, Severo Ochoa, Alberti o Salinas se alojaron en la Residencia, que también tuvo como visitantes ilustres a Einstein, Keynes, Le Corbusier, Marie Curie, Stravinsky, Valéry o Chesterton.
Todas esas actividades quedaron interrumpidas durante la Guerra Civil y la dictadura franquista.
En 1986 la Residencia recuperó su nombre y su espíritu, y desde entonces "está empeñada en la recuperación de una memoria que había sido pisoteada, ignorada y proscrita durante el franquismo", subrayó García Velasco, director honorario de esta institución.
La Residencia propicia también el diálogo entre arte y ciencia y la reflexión sobre diferentes aspectos de la historia y cultura contemporánea.
El centenario se celebrará a lo largo de este año y de 2011 y, para abrir boca, el próximo lunes comienza el ciclo "Maestros x Maestros (de la poesía contemporánea)", que inaugura el escritor estadounidense Mark Strand con una conferencia sobre Octavio Paz.
En semanas posteriores, Seamus Heaney, Premio Nobel de Literatura, recordará la figura de T. S. Eliot; José Manuel Caballero Bonald se centrará en García Lorca; el polaco Adam Zagajewski hablará de Antonio Machado y el venezolano Rafael Cadenas lo hará sobre Gil de Biedma.
El "maestro" Antonio Gamoneda recordará a Jorge Guillén, otro gran maestro; la uruguaya Ida Vitale dedicará su intervención a José Ángel Valente, y Pere Gimferrer a Juan Ramón Jiménez.
Otras actividades se harán eco de la labor de las nuevas generaciones de poetas.
La visita que Le Corbusier realizó a España en 1928 se recordará en la exposición "Una casa-un palacio", que se inaugurará el próximo 21 de mayo y que contará con planos originales, pinturas y piezas de mobiliario del arquitecto suizo.
La Residencia tiene en marcha otra exposición, "Viajeros por el conocimiento", que recreará el rico intercambio que tuvo esta institución con intelectuales y científicos de todo el mundo entre 1920 y 1936.
El Museo del Prado, el Reina Sofía y CaixaForum acogerán exposiciones relacionadas con la Residencia, que también saldrá de Madrid y compartirá sus cien años con el Palau Robert de Barcelona, el Centro Cultural de la Generación del 27 en Málaga y el Centro Federico García Lorca en Granada, entre otros.
Diferentes conciertos y obras de teatro; publicaciones como el facsímil de la revista "Residencia", y el ciclo "Reflexiones sobre Europa" son otras actividades programadas con motivo del centenario.
Los increíbles archivos que alberga la Residencia están también disponibles en la red a través del Portal Edad de Plata (www.edaddeplata.org), gracias al cual se puede acceder a innumerables publicaciones y a los documentos de la Junta para Ampliación de Estudios.
La JAE conservaba los expedientes de todas las becas que se concedieron a numerosos intelectuales españoles para estudiar en el extranjero. "Todos los que luego fueron alguien" están en ese archivo, comentaba hoy Carlos Wert, responsable de la digitalización de los fondos de la Residencia. EFE
OBITUARIO: IN MEMÓRIAM
Con 95 años, y toda una vida y una carrera académica en Estados Unidos, ha muerto el 6 de mayo Juan Luis Alborg, un hombre excepcional, uno de los últimos mohicanos del exilio de la posguerra civil. Heterodoxo historiador de la literatura, supo, con su verbo afilado y socarrón, apasionado y radical, hacerse un hueco en la historiografía de nuestras letras patrias incomodando a todos, tirios y troyanos del hispanismo más casposo, desde las remotas tierras de la muy lejana Bloomington (Indiana), que ya es decir. Sus cinco tomos de la Historia de la literatura española son uno de los long-sellers de la editorial Gredos. Por su monumental y valiente Sobre crítica y críticos le cayeron dardos afilados, que no consiguieron cambiar el rumbo de su escritura ni hacerlo comulgar con los capitostes de la crítica literaria española. Con la muerte de Juan Luis Alborg perdemos una manera de entender la filología, generosa y sabia, que practicaron en la editorial Gredos el arabista Julio Cortés (muerto también en fecha reciente), los lexicógrafos Joan Coromines y María Moliner y, por supuesto, Dámaso Alonso.
Un polémico e innovador estudioso
Traté telefónicamente y, sobre todo, por correo electrónico a Juan Luis Alborg desde julio de 2007 hasta el 11 de abril de 2010, fecha de su último e-mail. Apasionado y torrencial, de verbo fluido y grácil, con una lucidez inhabitual para sus 95 años, su conversación transmitía siempre afecto y cariño. El rico anecdotario que acumulamos en nuestro gracioso intercambio de mensajes interminables llenaría sin duda tanto espacio como el de sus libros. Según me contaba con abierta delectación, hacía 35 años que un buen puro matutino, un butacón y la lectura paciente le llenaban un día tras otro de su provecta edad. Estaba de vuelta de todo y más, sin prejuicios ni acrimonia: su único temor (atávico) eran los vientos embravecidos del Medio Oeste; su gran ilusión, recuperar algún día su casa y su biblioteca de la sierra de Madrid y compartir con dos o tres amigos una tira de asado. Descansa en paz, maestro y amigo, y recibe por última vez este "abrazo transoceánico" que nos enviábamos siempre y que nunca pudimos darnos.
Manel Martos es editor de Gredos.
martes, 4 de mayo de 2010
El niño yuntero - Miguel Hernández
El Niño Yuntero
Carne de yugo, ha nacido
más humillado que bello,
con el cuello perseguido
por el yugo para el cuello.
Nace, como la herramienta
a los golpes destinado,
de una tierra descontenta
y un insatisfecho arado.
Entre estiércol puro y vivo
de vacas trae a la vida
un alma de color de olivo
vieja y ya encallecida.
Empieza a vivir y empieza
a morir de punta a punta
levantando la corteza
de su madre con la yunta.
Empieza a sentir y siente
la vida como una guerra,
y a dar fatigosamente
en los huesos de la tierra.
Contar sus años no sabe
y ya sabe que el sudor
es una corona grave
de sal para el labrador.
Trabaja y mientras trabaja
masculinamente serio,
se unge de lluvias y se alhaja
de carne de cementerio.
A fuerza de golpes, fuerte,
y a fuerza de sol, bruñido,
con una ambición de muerte
despedaza un pan reñido.
Cada nuevo día es
más raíz, menos criatura,
que escucha bajo sus pies
la voz de la sepultura.
Y como raíz se hunde
en la tierra lentamente
para que la tierra inunde
de paz y panes su frente.
Me duele este niño hambriento
como una grandiosa espina,
y su vivir ceniciento
revuelve mi alma de encina.
Lo veo arar los rastrojos,
y devorar un mendrugo,
y declarar con los ojos
que por qué es carne de yugo.
Me da su arado en el pecho,
y su vida en la garganta
y sufro viendo el barbecho
tan grande bajo su planta.
Quién salvará a este chiquillo
menor que un grano de avena
De dónde saldrá el martillo
verdugo de esta cadena
Que salga del corazón
de los hombres jornaleros,
que antes de ser hombres son
y han sido niños yunteros.
Carne de yugo, ha nacido
más humillado que bello,
con el cuello perseguido
por el yugo para el cuello.
Nace, como la herramienta
a los golpes destinado,
de una tierra descontenta
y un insatisfecho arado.
Entre estiércol puro y vivo
de vacas trae a la vida
un alma de color de olivo
vieja y ya encallecida.
Empieza a vivir y empieza
a morir de punta a punta
levantando la corteza
de su madre con la yunta.
Empieza a sentir y siente
la vida como una guerra,
y a dar fatigosamente
en los huesos de la tierra.
Contar sus años no sabe
y ya sabe que el sudor
es una corona grave
de sal para el labrador.
Trabaja y mientras trabaja
masculinamente serio,
se unge de lluvias y se alhaja
de carne de cementerio.
A fuerza de golpes, fuerte,
y a fuerza de sol, bruñido,
con una ambición de muerte
despedaza un pan reñido.
Cada nuevo día es
más raíz, menos criatura,
que escucha bajo sus pies
la voz de la sepultura.
Y como raíz se hunde
en la tierra lentamente
para que la tierra inunde
de paz y panes su frente.
Me duele este niño hambriento
como una grandiosa espina,
y su vivir ceniciento
revuelve mi alma de encina.
Lo veo arar los rastrojos,
y devorar un mendrugo,
y declarar con los ojos
que por qué es carne de yugo.
Me da su arado en el pecho,
y su vida en la garganta
y sufro viendo el barbecho
tan grande bajo su planta.
Quién salvará a este chiquillo
menor que un grano de avena
De dónde saldrá el martillo
verdugo de esta cadena
Que salga del corazón
de los hombres jornaleros,
que antes de ser hombres son
y han sido niños yunteros.
lunes, 3 de mayo de 2010
En la casa encendida de Luis Rosales
Una exposición retrata al poeta y se adelanta al centenario de su nacimiento
ELSA FERNÁNDEZ-SANTOS - Madrid - 29/04/2010 . EL PAÍS
El viaje de las palabras puede ser tan alambicado como el de un aventurero. Quizá por eso Luis Rosales (Granada, 1910-Madrid, 1992) jamás hubiera imaginado que el título de uno de sus mejores poemarios, La casa encendida (1971), acabaría siendo cuarenta años más tarde el nombre de un espacio urbano en el que se cruzan con insólito sentido común pasado y futuro. La Casa Encendida de Madrid inauguraba ayer Luis Rosales. El contenido del corazón, una exposición que organizada con la Sociedad Estatal de Conmemoraciones culturales (SECC), y en colaboración con el Archivo Histórico Nacional, se adelanta al centenario del nacimiento del poeta, el próximo 31 de mayo.
Más de un centenar de obras de arte, además de manuscritos, primeras ediciones, cartas, apuntes, fotografías y recuerdos nos acercan a un poeta, académico y ensayista sobre el que Caballero Bonald apunta: "Luis Rosales, por encima de modas y modos, continúa ocupando una de las cumbres poéticas de nuestro siglo XX".
Archivos privados, museos e instituciones han participado en esta exposición que reúne junto a documentos de Vicente Aleixandre, Dámaso Alonso, Gerardo Diego o Pablo Neruda pinturas de Dalí, Picasso, Rafael Alberti, Benjamín Palencia, Gustavo Torner, César Manrique o Sempere. "No queríamos los nombres sino encontrar obras que estuvieran conectadas directamente con el mundo de Rosales", explica Paloma Esteban, comisaria junto a Xelo Candel de la muestra. "Reunir las obras de los amigos de Rosales es lo mismo que recorrer la historia del arte español de la segunda mitad del siglo XX", continúa Paloma Esteban.
De todos, estremece un dibujo de Lorca, un hermoso florero perteneciente a una colección privada. La sombra de la muerte de Lorca siempre sobrevoló sobre Rosales, en cuya casa Lorca fue apresado poco antes de su fusilamiento. Pero, Rosales (el poeta que escribió "la palabra del alma es la memoria", el autor de Diario de una resurreción) ha sobrevivido a una mancha en gran medida injusta, como recordaba ayer el director de La Casa Encedida, José Guirao, en una inauguración que encabezó el presidente de Caja Madrid, Rodrigo Rato. Un poeta al que le deben la coincidencia de un nombre y quizá la de un secreto, como escribe Caballero Bonald: "El ingenio descriptivo, la adjetivación insólita, la inventiva semántica, los adverbios desusados, el fraseo reincidente, van creando en La casa encendida una atmósfera medio ilusoria, entre la realidad y el ensueño, de itinerario hacia algún secreto emocionante".
Más de un centenar de obras de arte, además de manuscritos, primeras ediciones, cartas, apuntes, fotografías y recuerdos nos acercan a un poeta, académico y ensayista sobre el que Caballero Bonald apunta: "Luis Rosales, por encima de modas y modos, continúa ocupando una de las cumbres poéticas de nuestro siglo XX".
Archivos privados, museos e instituciones han participado en esta exposición que reúne junto a documentos de Vicente Aleixandre, Dámaso Alonso, Gerardo Diego o Pablo Neruda pinturas de Dalí, Picasso, Rafael Alberti, Benjamín Palencia, Gustavo Torner, César Manrique o Sempere. "No queríamos los nombres sino encontrar obras que estuvieran conectadas directamente con el mundo de Rosales", explica Paloma Esteban, comisaria junto a Xelo Candel de la muestra. "Reunir las obras de los amigos de Rosales es lo mismo que recorrer la historia del arte español de la segunda mitad del siglo XX", continúa Paloma Esteban.
De todos, estremece un dibujo de Lorca, un hermoso florero perteneciente a una colección privada. La sombra de la muerte de Lorca siempre sobrevoló sobre Rosales, en cuya casa Lorca fue apresado poco antes de su fusilamiento. Pero, Rosales (el poeta que escribió "la palabra del alma es la memoria", el autor de Diario de una resurreción) ha sobrevivido a una mancha en gran medida injusta, como recordaba ayer el director de La Casa Encedida, José Guirao, en una inauguración que encabezó el presidente de Caja Madrid, Rodrigo Rato. Un poeta al que le deben la coincidencia de un nombre y quizá la de un secreto, como escribe Caballero Bonald: "El ingenio descriptivo, la adjetivación insólita, la inventiva semántica, los adverbios desusados, el fraseo reincidente, van creando en La casa encendida una atmósfera medio ilusoria, entre la realidad y el ensueño, de itinerario hacia algún secreto emocionante".