viernes, 1 de julio de 2011

Acentuación de los diptongos



Las palabras con diptongo se acentúan siguiendo las reglas generales. Hasta aquí todo bien. La gracia está en saber qué se considera diptongo a efectos ortográficos y dónde se tiene que colocar la tilde en caso de que tengamos que acentuar ortográficamente un diptongo.



Bien, vayamos por partes. Cuando una palabra contiene una secuencia de dos vocales en posición tónica, necesitamos saber si estas se consideran diptongo ortográfico o hiato. Para ello hemos de conocer ciertas reglas ortográficas que son convencionales y no tienen por qué ajustarse a lo que efectivamente se pronuncia. Es este uno más de los casos de discrepancia entre escritura y pronunciación. Consideramos que estamos ante un diptongo cuando tenemos:



a) una vocal abierta y una cerrada (el orden es indiferente): cuáquero, béisbol, bonsái, aire, rediez, Sainz, ion



b) dos vocales cerradas diferentes: cuídate, Viúdez, interviú, jesuita, construir, Luis, hui



Como es fácil comprobar, los ejemplos de a) se acentúan o se dejan de acentuar gráficamente siguiendo las reglas generales. Así, cuáquero lleva tilde por ser palabra esdrújula; béisbol, por ser palabra llana terminada en ele; y bonsái, por ser palabra aguda terminada en vocal. En cambio, aire no se acentúa por ser llana terminada en vocal; rediez, por ser aguda terminada en zeta; y Sainz e ion, porque, como buenos monosílabos, no deben llevar tilde. Nótese que los nombres propios de persona españoles se acentúan siguiendo las reglas generales y que ion, guion y palabras similares se consideran monosílabos a afectos de acentuación en la Ortografía de la lengua española de 2010. Si aplicas tú mismo las reglas de acentuación a los ejemplos de b), comprobarás que su acentuación o ausencia de ella sigue siendo perfectamente regular.



Para saber qué se considera vocal abierta y qué, vocal cerrada, hay una regla poco científica, pero muy eficaz (a mí, por lo menos, me sigue sirviendo desde que me la enseñaron en el colegio con nueve años). Las gorditas (a, e, o, nótese el redondelito) son fuertes (= abiertas). Las flaquitas (i, u) son débiles (= cerradas). Pero, por favor, no le contéis a nadie que explico la acentuación así o sería el fin de mi reputación como lingüista.



Conviene saber también que la presencia de una hache intercalada no rompe un diptongo. Por ejemplo, el sustantivo truhan, a pesar de la hache, contiene un diptongo ortográfico, por lo que es monosílabo y no puede llevar tilde.



Bien, ¿y dónde va la tilde si es que se tiene que poner? Esto también es convencional. En el caso a), es decir, vocal abierta más vocal cerrada, la tilde va siempre en la vocal abierta. Es lo que vemos en cuáquero, béisbol y bonsái. En el caso b), o sea, dos vocales cerradas diferentes, la tilde se coloca siempre sobre la segunda, como en cuídate, Viúdez e interviú.



Fácil, ¿no? Bueno, espérate a que te cuente las reglas para acentuar los triptongos y los hiatos y después me lo dices. Pero de momento te dejaré descansar.



Nota: esta entrada está adaptada a las reglas de la Ortografía de la lengua española de 2010.





1 comentario:

  1. Espinoso asunto, esto de los acentos... ¡pero muy interesante!

    Para aprender o consultar dudillas, este acentuador puede sacar de más de un apuro...

    ¡Espero que os guste!

    Un saludo y enhorabuena por el blog :)

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